FOMO - Inversión
- Ana Vujica
- 10 jul
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 2 sept
Todo el mundo ha experimentado FOMO en algún momento.
Ya sea por conseguir una entrada para un partido codiciado, obtener una mesa en el restaurante más prestigioso de la ciudad o no invertir en el lugar correcto en el momento correcto, todos conocemos el miedo a perderse algo.
Pero especialmente en el mundo de las finanzas, este miedo puede ser peligroso.
Invertir por miedo a perderse algo (FOMO), no es un fenómeno nuevo, pero en tiempos de redes sociales y ruido informativo constante, está más presente que nunca.

¿Qué es la inversión FOMO?
El FOMO, también conocido como miedo a perderse algo , describe la reacción psicológica a la sensación de sentirse excluido, especialmente cuando otros parecen estar obteniendo beneficios. En el ámbito de las inversiones, esto se manifiesta de la siguiente manera:
"¡Todo el mundo habla de esta moneda, yo también tengo que entrar!"
"Mi colega ganó un 40% con estas acciones, ¡no puedo quedarme atrás!"
El problema: estas decisiones rara vez se basan en un análisis sólido, sino más bien en la presión social, la emoción y el pensamiento a corto plazo.
¿Por qué las emociones son malas?
asesores financieros
Las emociones son parte de la inversión, ya sea el entusiasmo cuando los precios suben o la incertidumbre en tiempos turbulentos.
Pero la cosa se vuelve problemática cuando las emociones no sólo resuenan sino que también controlan las decisiones.
Quien compra impulsivamente porque "se siente bien" o vende porque los precios están cayendo no está siguiendo una estrategia, sino reaccionando.
Esto no crea estabilidad, sino más bien un subir y bajar constante.
Las emociones son humanas. ¡Pero no son un plan!
La creación de riqueza sostenible requiere claridad, estructura y visión, no intuiciones en momentos de incertidumbre.

Cómo reconocer el FOMO
El FOMO suele aparecer sin que nos demos cuenta. Presta atención a las siguientes señales de advertencia:
Sientes la presión del tiempo: "¡Tengo que irme ahora!"
Confías en los consejos de las redes sociales en lugar de en la investigación.
Invierte más de lo previsto inicialmente
No puedes explicar cómo funciona el producto.
Cómo evitar el FOMO
¡Vale la pena tener un plan!
En lugar de perseguir la publicidad sin rumbo, crea un plan.
A continuación se presentan algunas estrategias que pueden ayudarle a establecerse:
Ampliamente diversificado
Nuestra regla principal es la diversificación. En lugar de apostar por una acción de moda o criptomonedas especulativas, te harás un favor y mantendrás el riesgo bajo. Además, estarás más tranquilo ante las fluctuaciones del mercado.
La paciencia tiene recompensa
El mercado de valores es como una montaña rusa, y los inversores exitosos lo saben y lo aprovechan. Se ha demostrado una y otra vez que el mercado de valores crece a largo plazo.
El efecto del interés compuesto
La inversión a largo plazo permite beneficiarse del efecto del interés compuesto. Quienes invierten durante años o décadas verán crecer su patrimonio exponencialmente.
(Escribiré más sobre esto en una entrada del blog que podría interesarte, no te la pierdas)
Respira profundamente
Antes de invertir, pregúntese nuevamente por qué quiere invertir y busque asesoramiento de su asesor.

El FOMO como fuerza impulsora
El FOMO no siempre tiene por qué ser algo malo. Los estudios demuestran que la sensación de perderse algo es lo que lleva a muchas personas a pensar en sus finanzas.
Eso está bien siempre y cuando no genere presión sino más bien curiosidad.
Conclusión